sábado, 9 de enero de 2010


Cirugía Maxilofacial - Psicoprofilaxis quirúrgica, Una disciplina que interdisciplina.  Recomendar el sitio a un amigo Opinar sobre este tema en los foros 4564 visitas

Un trabajo para no quedarnos en silencio

Resumen:
A lo largo de este escrito intentaremos destacar la importancia de la relación cirujano/a***-paciente en el momento de una intervención quirúrgica. Indagaremos el lugar del dolor desde la percepción tanto del profesional de la salud como así también desde quien en dicha situación oficia de paciente. Utilizaremos frases dichas en los primeros encuentros entre el profesional de la salud y quienes consultan y/o solicitan la intervención para poder reflexionar sobre aquellas significaciones que circulan en el Imaginario Social sobre conceptos tales como: angustia, ansiedad, miedo, vínculo cirujano/a-paciente y dolor. Entendiendo la importancia de la Psicoprofilaxis quirúrgica como una herramienta que habilita y posibilita una mejor calidad y ejercicio de la práctica profesional  en tanto tiene en cuenta las posiciones propiamente subjetivas del paciente.
Abstract
In this paper, we will try to emphasize the importance of the relationship between surgeon and patient at the moment of a surgery. We will study the areas of pain from both the health care professional’s and the patient's perception. We will use remarks from the first consultations between the health care professionals and the patients who visit them and/or request the operation to reflect about the connotations that circulate in the collective imaginary about concepts such as: anguish, anxiety, fear, relationship between surgeon and patient, and pain. Psychoprophylaxis in surgery is a tool that allows a better professional practice and higher quality results because it takes into account the patient’s frame of mind.

Palabras Claves: Psicoprofilaxis, Miedo, Angustia, Dolor

Psicoprofilaxis Quirúrgica


Una disciplina que interdisciplina
Un trabajo para no quedarnos en silencio
Autores:
• Bravo, Héctor Facundo
• Corino, Carolina Alicia
• Falkinhoff, Pablo

 Cargos académicos:
1. Residente del servicio de Cirugía y Traumatología Buco Maxilo Facial  del Sanatorio La Florida
2. Lic  en  Psicología
3. Jefe de Servicio de Cirugía y Traumatología Buco Maxilo Facial  del Sanatorio La Florida
 Centro de trabajo: Santorio La Florida
Direc consultorio:   Viamonte  1646 4° 86  ciudad autonoma de Buenos Aires,Arg.
TEL; 011-49574968
Correo electrónico: facundobravo25@hotmail.com
                                   
Pensamos a la consulta, como momento de encuentro en el que el profesional puede privilegiar  la palabra y la escucha favoreciendo el lazo con el paciente y de esta manera aumentar las posibilidades de éxito de la  intervención quirúrgica.

En muchas oportunidades nos encontramos con comentarios  y percepciones angustiantes  ante la proximidad de una intervención quirúrgica . Asimismo se observa que aun  aquellos pacientes que a lo largo de su vida han sufrido intervenciones quirúrgicas de alta complejidad, demuestran sin embargo una incapacidad para afrontar un tratamiento odontológico. Despierta una inexplicable intensidad de angustia, tanto en niños como en adultos. Se escuchan frases como “hace todo lo que mas puedas. Me quiero ir lo antes posible de acá”

Rene Spitz, ha dicho que la boca es la zona de máxima seguridad y perdura así a lo largo de la vida. El dentista trabaja ahí. Toda esa zona que fue la más importante en el periodo inicial de la vida revive inconscientemente ante el quehacer odontológico.
La visita al consultorio odontológico  es una situación ansiogena mas allá de las características formales. Arminda Aberasturi  quien se acerco a la Odontopediatria en 1951 publicando un articulo para la revista de la Asociación Odontológica Argentina (AOA) “ Trastornos emocionales en el niño vinculados con la dentición” plantea que existen varios tipos de ansiedades frente al tratamiento odontológico: aquellas de los niños mas pequeños, de los preescolares, de los escolares, los púberes y de los adultos. En un primer periodo de la vida sostiene que las piezas dentarias representan para el niño el vínculo con los padres; es por eso que perderlos, o ser explorados ó tratados, reactiva aquellas situaciones de las que los dientes son símbolos. Las ansiedades que surgen durante la primera dentición son más toleradas, ya que esas piezas habrán de reemplazarse. En el latente, adolescente ó adulto se incrementa la ansiedad ya que la pérdida de muelas y  dientes lo exponen a una pérdida definitiva y esto se transforma en símbolo de lo definitivo, de la muerte.
Frases de los pacientes:
- “Estoy nerviosa , tengo miedo a las agujas” (Femenino 12 años)
- “No quiero anestesia porque después no puedo hablar”( Femenino 23 años)
- “Hay que cortar encía? me va a quedar la cara hinchada?” (Masculino 15 años)
- “hace todo lo que mas puedas. Me quiero ir lo antes posible de acá” (Masculino. 29 años)
-  “A mi hermano le tuvieron que dar puntos y se le hincho la cara” (Masculino. 24 años)
- “Que…me va a dormir toda?” (Femenino. 10 años)
- “Que… ya esta? Pensé que me iba a doler mucho” (Masculino.15 años)
- “No puede dormirme toda, así no siento nada” (Femenino 40 años)
- “Yo me entrego a usted,  estoy en sus manos”
- “Haga lo que quiera usted es el que sabe”
- “Es muy difícil? , después puedo ir a trabajar” (Masculino. 37 años)
- “ya me va a sacar la muela? Yo no estoy preparada. Mejor vengo la próxima” (femenino 24 años)

Las frases  dichas por los pacientes al odontólogo/cirujano frecuentemente se relacionan con el miedo. “Estoy nerviosa, tengo miedo a las agujas”, “tengo miedo a que me duela” “Que… ya esta? Pensé que me iba a doler mucho” entre otras. La insistencia de alguna de ellas expresadas por pacientes de diferente sexo y edad nos invitan a pensar el lugar del miedo frente a la proximidad de la intervención. Podemos referirnos por un lado a un miedo irracional ó inconsciente enraizado en el primitivo desarrollo de la personalidad y común a todo ser humano, y por otro lado un miedo iatrogénico de causa contingente, sobre agregada, producida por el propio odontólogo al ejercer la profesión.  Es importante diferenciar miedo de ansiedad. La ansiedad es una reacción generalizada de temor a estímulos desconocidos mientras que el miedo es especifico. La angustia tiene un inequívoco vinculo con la expectativa, es angustia ante algo y lleva adherido un carácter de indeterminación y ausencia de objeto. El uso lingüístico correcto le cambió el nombre cuando ha hallado un objeto sustituyéndolo por el de miedo. Una paciente comenta “Estoy nerviosa, tengo miedo a las agujas” Las agujas es allí el objeto especifico a partir del cual experimenta el miedo.

Toda intervención quirúrgica con anestesia local ó regional en el área bucal exige como requerimiento sine qua non la participación voluntaria del paciente por medio de una amplia abertura de la boca, durante un cierto tiempo en el que debe mantenerse quieto permitiendo un gran despliegue de instrumental generador de ruidos molestos “el ruido se amplifica enormemente pues el macizo cráneo-facial hace de caja de resonancia” (Egozcue, M.1988). El no permitir alguna maniobra específica en la boca es una situación frecuente en el “setting odontológico”. Están quienes comienzan a cerrar la cavidad bucal a medida que el odontólogo comienza a trabajar. Entre algunas de las situaciones se puede mencionar  el momento de la anestesia, el uso del torno, la extracción de una pieza ,la colocación de implantes etc. Sostenemos que aquel profesional que establezca una relación empatica con el paciente, propiciando la confianza y la relajación del mismo creara un ambiente y clima facilitador para la realización de la técnica quirúrgica. Es importante  que ambos,  paciente y odontólogo/cirujano  en un primer tiempo de la consulta, hayan establecido un  momento de encuentro en el que se  pueda privilegiar  la palabra y la escucha, favoreciendo este vinculo y de esta manera aumentar las posibilidades de éxito de la  intervención quirúrgica.

El trabajo interdisciplinario abre la posibilidad de interactuar con otros campos de conocimiento. Es desde esta perspectiva que nos surge la motivación para realizar este escrito, desde el propio vivenciar, la construcción de saberes  cruzando los discursos médicos,  psicológicos y aquellas frases dichas por los propios pacientes en la consulta.  Maria Mucci plantea “Si bien la Psicoprofilaxis no “cura” la enfermedad orgánica, ni “salva” de la operación, posibilita mitigar, mejorar, contener, otorgar sentido a la situación para el enfermo y le abre un espacio para que el pueda poner en palabras aquello que siente frente a la operación (…) los cirujanos y los psicólogos ni miramos ni escuchamos lo mismo” (Mucci, M 2004) Médicos, Odontólogos, Cirujanos y Psicólogos intervenimos sobre el cuerpo. Como psicólogos desde el lugar de la palabra y advertidos de los efectos de la misma sobre el  cuerpo. Un cuerpo que habla, cuerpo hablado, ó al menos un cuerpo que habrá de manifestarse deviniendo palabra. Por su parte los Médicos/ Odontólogos/ Cirujanos, desde el marco de la medicina fundamentalmente piensan el cuerpo desde lo somático. No se trata de crear una ilusión de unidad en lo que respecta al discurso psi y al discurso médico y sus respectivos “saberes”, quizás consiste en sostener la tensión entre los mismos y ofrecer un encuentro. “Lo que parecía imposible se torna viable: la “escucha” del psicólogo con “el arte de trabajar con las manos” propia de la cirugía”

El proceso quirúrgico es multifactorial, no es buscado salvo las “cirugías estéticas”, y amenaza  la integridad del cuerpo, deja marca. Es intrusivo y agresivo.  El proceso es una alteración orgánica que se cura con factores externos.  Mordechai Beyacar plantea que un hecho puede ser traumático ó no  dependiendo de la subjetividad del paciente, “un evento, independientemente de su calidad, intensidad y significado, puede ser experimentado como vivenciar estresante ó traumático”.

Maria Mucci plantea que la eficacia de la información proporcionada al paciente en el marco de la Psicoprofilaxis Quirúrgica en el momento previo a la intervención esta sujeta a una serie de factores: como se proporciona la información, al estilo comunicacional de quien informa, a la personalidad del paciente y a como este la interpreta. Una cosa es informar que es “Unidireccional” y otra muy distinta es comunicar que es “un ida y vuelta” entre profesional y paciente.

 Informar es un proceso comunicacional complejo cumple dos funciones (Barredo, C, Covaro, J, Mucci, M y Col. 2005)” “el esclarecimiento del enfermo y la obtención del consentimiento informado”.

El medico es quien debe habilitar el espacio de las preguntas y responder hasta tanto el paciente y/o su grupo familiar lo requiera. Luego del acto comunicacional puede generarse en el paciente angustia y ansiedad. La palabra ansiedad como la palabra angustia derivan de angere, que significa opresión, sofocación y que alude a la sensación de estreches.

Ante el proceso comunicacional en el paciente se activan fenómenos biológicos a nivel corporal “La información llegará al arquicerebro hipotalamico (…) activara sus pulsaciones de lucha y de fuga, pero su neocortex le informara que no puede escapar, porque la enfermedad lo ataca por la espalda. Oleadas de catecolamidas aceleraran su pulso, aumentaran su presión arterial y elevaran su glucemia. La hipófisis lanzara al torrente circulatorio somatotrofina, prolactina y ACTH y disminuirá las gonadotropinas. Se elevará el cortisol plasmático y caerán las cifras de testosterona y estrógenos, constituyendo un síndrome hipercatabolico” (Abecasis, I 1991)  Por su parte ante situaciones que generan ansiedad puede ocurrir que suden las manos, palpite el corazón,  se tenga la sensación de nudo en la garganta, cueste hablar con claridad, la respiración se vuelva fatigosa, la musculatura se ponga tensa y se produzca sensación de mareo.

La Psicoprofilaxis propone ayudar a que se movilicen defensas adecuadas que sean capaces de neutralizar la posible angustia que genere la intervención quirúrgica y asumir los cambios estéticos, funcionales y psicológicos que surjan como consecuencia de ella en forma inmediata y mediata.

Teniendo en cuenta lo mencionado anteriormente consideramos  a la Psicoprofilaxis Quirúrgica como una herramienta fundamental en la práctica cotidiana de un profesional de la salud.

Es preciso que el odontólogo como el cirujano internalicen un modelo de relación con sus pacientes que incluya este aspecto de la Psicoprofilaxis como una rutina clínica, otorgando un espacio donde el paciente pueda decir  y no caiga en la pasividad impotente que conlleva la contundencia de la cirugía y que hace que el cirujano asuma una responsabilidad ilimitada. Promoviendo así que la palabra del paciente no quede obturada por el silencio.

Bibliografía

- Abecasis, I (1991) “Cirugía y “Stress”. El Cirujano como Psicoterapeuta” Revista Argentina de Cirugía. Vol.60 :207-212
- Aberasturi, A (1991. 4° reimpresión) “Ansiedades frente a la experiencia odontológica” en Aportaciones al Psicoanálisis de  Niños. Buenos Aires, Paidos
- Barredo, C, Covaro, J, Mucci, M y Col. (2005)” Efectos de la información Medica en la Población Quirúrgica” Rev. Argentina de Cirugía 88 (1-2)
- Besada, M y Col. (Marzo 2000) “ De Psicologos y Cirujanos…Un encuentro posible” Periódico El Otro. Psicoprofilaxis Quirurgica.6-7
- Carranque Chaves, Fernandez Berrocal y Col.(2004)  “Dolor Postoperatorio e inteligencia emocional” Rev. Esp. Anestesiol. Reanim. Vol.51. Pag 75-79
- Egozcue, M.(1988) Odontopediatria y Psicología Buenos Aires Ediciones Kargieman
- Finkel, D y  Schleger, R “El dolor postoperatorio. Conceptos básicos y fundamentos para un tratamiento adecuado” Rev. Hospital Gral. de Agudos J. Ramos Mejia. Edición Electrónica Buenos Aires. Arg. Vol.VIII. N°1. 2003
- Glasserman, M y Sluzki, C (1969) “Psicoprofilaxis Quirurgica: Una intervención acerca de su efectividad” Revista Acta Psiquiat. Psicol. Lat. Vol. 15: 261-264
- Martinez-Vazquez de Castro y Torres (2000) en Prevalencia del dolor postoperatorio. Alteraciones fisiopatologicas y sus alteraciones. Rev. Soc. Esp.Dolor. Vol 7: 465-476
- Mucci, M (2004) Psicoprofilaxis Quirúrgica. Una practica en convergencia interdisciplinaria  Buenos Aires, ED. Paidos.
- Mucci, M Y cols. (2000) 'Estrategias de intervención “Psi” en situaciones médicas: Psicoprofilaxis quirúrgica'. Revista Argentina de Clínica Psicológica Vol. IX: 47-57.
- Mucci, M y Benaim, D (2005) “Psicología y Salud. Calidoscopio de practicas diversas” Revista Psicodebate 6. Psicología, cultura y sociedad: 123-137
- Lejarraga, A (2004) “La construcción Social de la enfermedad” Revista Arch. Argent. Pediatr. 102/4: 271-276

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